BEIRUT.- Al menos 100 muertos y 4,000 de heridos fueron las cifras preliminares ofrecidas la vispera por las autoridades del Líbano, en dos explosiones que destruyeron el puerto capitalino, donde el presidente libanés dijo que habian 2.750 toneladas de nitrato de amonio, utilizado para fertilizantes y bombas, que se habían almacenado durante seis años sin medidas de seguridad, por lo que dijo que los responsables pagarán el precio.
Se sintió como un terremoto de magnitud 3.5, según el centro de geociencias de Alemania GFZ, y se escuchó tan lejos como en Chipre a más de 200 kilómetros (180 millas) a través del Mediterráneo y el portal de noticias de Arabia Saudita Al-Arabiya, informó que la explosión ocurrió en uno de los depósitos de armas de la organización terrorista en el puerto.
El gobernador de Beirut, Marwan Abboud, rompió a llorar mientras recorría el sitio y exclamó: "Beirut es una ciudad devastada" y el primer ministro Hassan Diab prometió que "los responsables pagarán" por lo que ha ocurrido.
Uno de los principales expertos en bombas de Israel, Boaz Hayoun, dijo que los fuegos artificiales podrían haber sido un factor desencadenante de la explosión más grande, ya que antes de la gran explosión... en el centro del incendio, en las imágenes se pueden ver chispas y escuchar sonidos como de palomitas de maíz y silbidos.
El incidente se produjo en un momento en que la economía del Líbano se enfrenta al colapso de la crisis financiera y con las restricciones del coronavirus muchos han perdido empleos, mientras que el valor de sus ahorros se ha evaporado a medida que la moneda ha caído en valor frente al dólar.
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