TOKIO, - Casi todos los japoneses en su país y los que residen en otros, están muy pendientes del casamiento este martes 26 de octubre, de la princesa Mako con un plebeyo, tras haberse comprometido hace tres años, diferencia social que ha frustrado la boda a causa de los frecuentes escándalos y especulaciones mediáticas sobre el tema.
Conforme publica la agencia británica de noticas, Reuters, tantos han sido los escándalos mediáticos que ha dejado a la sobrina del empedrador de 29 años. con una trastorno por estrés traumático (TEPT) y sin la bendición de sus padres, algo muy preocupante entre los japoneses.
Detalla que la princesa Maco se convertirá en una ciudadana común después de casarse con Kei Komuro, un graduado de derecho japonés de 30 años que vive en Nueva York, pues las leyes japonesas obligan a las mujeres de la familia imperial a abandonar el estatus real e incluso, social.
"Su matrimonio del martes consistirá principalmente en presentar el papeleo y luego celebrar una conferencia de prensa. Si bien casarse con miembros de la realeza no es infrecuente en Japón, la falta de pompa para una boda real sí lo es. Mako incluso rechazó el pago habitual de 1,3 millones de dólares que se da a las mujeres que abandonan la familia", precisa la crónica.
Los japoneses se han escandalizado, primero, al publicarse un problema de dinero de la madre del prometido, quien luego admitió que lo hizo para comprarle un regalo de boda.
Ademas, porque en otra ocasión, Komuro regresó a Japón en septiembre como un graduado de Fordham y empleado en un bufete de abogados de Nueva York, pero su cola de caballo casual causó un frenesí mediático, ya que se consideró "irrespetuoso".
"Seré feliz si puedo formar una familia cálida y cómoda llena de sonrisas", dijo Mako en una conferencia de prensa, con las miradas cariñosas que intercambiaron en esta foto, cautivando a sus compatriotas.
Por los escandalos, en febrero de 2018, el matrimonio se pospuso hasta el pasado 2020, aparentemente por más tiempo para "prepararse", pero seis meses después, Komuro se fue a la facultad de derecho de la Universidad de Fordham, para regresar solo tres años luego.
El padre de Mako, el príncipe heredero Akishino, dijo en una conferencia de prensa en 2018 que sin resolver el problema financiero, el matrimonio no podría tener lugar, y que en ese entonces, él y su hija ya no hablaban tan a menudo.
La historia de esta pareja ha evocado comparaciones con el príncipe Harry y Meghan y la plebeya Markle de Inglaterra, quienes renunciaron como miembros de la realeza en 2020 y se mudaron a los Estados Unidos,
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